domingo, 27 de febrero de 2011

Un título más, un título menos.

En este preciso instante debería estar quemándome las pestañas a la luz de un foco de bajo consumo, preparando más de un final para empezar el año con la mochila livianita.
Sin embargo los pensamientos no se aquietan y la concentración se ha vuelto una presa muy difícil de alcanzar.
Tras un acuerdo de la institución donde curso, con una universidad de La Plata podré acceder a completar mis estudios y obtener la licenciatura.
Esta información me tendría que causar alegría y poner aún más las pilas.
Pero no es así, dado que como no voy a poder pagar la cuota, no tendré acceso a los años de estudio que reafirmarían mi título.
Quejarme estaría de más sabiendo que mi problema es un punto en el infinito mundo de problemas serios que aquejan a la humanidad. Pero no puedo evitar sentirme mal.
Me gustaría que la educación sea buena y accesible a todos, con esto quiero decir que me gustaría que la educación fuera pública en mi país.

viernes, 18 de febrero de 2011

La Hora del Planeta

Resulta que es muy duro volver de las vacaciones directo a encerrarme en mi casa de cemento, en un barrio de cemento, en una ciudad de cemento. Imaginar el atarceder que supongo desaparece detrás de un hermoso edificio de 12 pisos, paisaje directo de mi ventana me amarga el alma y me hace extrañar aún más la puesta que hasta hace unos días vi reflejarse en las hermosas olas del mar.
Pero como nada es eterno, sino sólo lo que así deseamos conservar en nuestras memorias y revivir con el pensamiento. Para ayudar a mi cabeza guardo las fotos de los días que auspician de pulmón para tirar para adelante el resto de un año que se viene cargado.






Por otro lado creo necesario comenzar a participar de una vez en las actividades que todos los años me mantienen marchando...
Y como el año pasado les quiero recordar sobre La Hora del Plantea: