miércoles, 1 de junio de 2011

De héroes y demonios

Clavó los frenos pero el caucho pintó el asfalto de negro. Estalló contra otro vehículo y los fierros se retorcieron. Tembló, gritó, se secó la sangre y camino unos metros. Miró por la ventanilla del otro conductor, pero no había nadie allí.
Los choques en la vida suelen darse así, sin avisos ni preguntas. Están los de este tipo, son muy comunes y los vemos de las más diversas maneras cada día por la pantalla.
Pero también están los otros y de esos vengo a hablar. Los otros son los que no vemos con los ojos, los que chocan dentro de nuestra cabeza, dentro de nuestro corazón. Golpes de ideas y de sentimientos.
Presencié una charla de casi 3 horas que brindó un ex combatiente de la Guerra de Malvinas. Él por suerte dijo, pudo estar en el Crucero Belgrano, también por suerte sobrevivió a su hundimiento. Entre explicaciones técnicas y descripciones que acercaban a las lágrimas contó su verdad, su vida antes y después, y el momento justo en que cambió para siempre.
Volví a casa con aroma a patriotismo, y no del barato que se compra en las esquinas. Aquel hombre me transmitió su mensaje, luchó por sus ideas y por su país, independientemente del resto y de lo que se escribió sobre la historia.
Mientras repasaba sus palabras que decidí robarle en un grabador leí un cometario en Facebook. Apreté los frenos pero fue tarde el choque dentro de mí se produjo sin remedio:


El tilde duró unos segundos, volví a repasar los comentarios y el choque fue tan fuerte que me costó creer lo que leía.
Del patriotismo y esas ganas de ser un país, una nación que no somos, a entender en parte por que no somos.
Decidí intervenir:



Mi desayuno en la bandeja de entradas fue que la conversación continuó en mi ausencia, y ahí fue cuando decidí no participar más por eso que dicen de no gastar pólvora en chimangos, pero siento un sabor amargo, por que justamente creo que es con estas ideas con las que hay que terminar, y por qué no debatir? Por que es una red y no les veo las caras ni se quienes son algunos de ellos? Ya no existe el café por medio para hacerlo, así que debería ser este el lugar.
Se habla de moral, respeto, educación gratuita, tolerancia, ejemplos para la sociedad, libertad en estos comentarios también.
Golpes de ideas y de sentimientos dije, de esos inesperados. Estas cosas en la web pasan a diario millones de veces y eso me inquieta bastante, por que detrás de un teclado todos podemos decir muchas cosas, pero el anonimato físico hace que digamos lo que realmente pensamos muchas veces.